1584 – Fundación de la cofradía bajo la advocación de Nuestra Señora de la Esperanza y el Arcángel San Miguel en la parroquia de Calanda por D. Alonso Gregorio, provisor del arzobispo de Zaragoza, con estatutos aprobados por el ordinario y los comendadores.
1593 – En el inventario de la parroquia aparecen palios así como una arca y madera para el Monumento: se celebran los oficios del Jueves y Viernes Santo, y el traslado y vela al Monumento.
1589/1592 – La Cofradía aparece en representación de los cristianos viejos de Calanda en sus pleitos contra los moriscos.
1595 – El estandarte de la Cofradía desfila en la inauguración del calvario de Santa Barbara.
1606 – El papa Paulo V otorga a la Cofradía una bula de aprobación en la que ya se incluía la advocación al Santísimo Sacramento y por la que se ingresaba en la Archicofradía Supra Minerva de Roma, lo que supuso el derecho sobre una serie de indulgencias y privilegios para los cofrades.
1608 – La Cofradía recibe un decreto de la Sagrada Congregación sobre las indulgencias de las cofradías del Santísimo Sacramento.
1628 – Con la carta puebla se concede una casa a la Cofradía y el compromiso de los nuevos pobladores de sostener la Hermandad.
1630 – Se festeja la octava del Corpus Christi.
1641 – Miguel Pellicer viaja a Madrid tras el milagro donde le recibe el rey. Se cree que Felipe IV regaló una armadura a Miguel que donó para ser usada por el personaje de Longinos en Semana Santa.
1643 – Se celebran las misas de Minerva.
1662 – En la visita pastoral se critica el poco rigor en el traspaso de cuentas entre los mayordomos, se ordena su revisión al prior y mayordomos.
1675 – Los visitadores de la orden de Calatrava ordenan que la Cofradía, por ser «justa y segura», se haga cargo de gestionar un censal de 2.200 libras jaquesas para, con los intereses que renten, sufragar los ornamentos y parte de los gastos de la obra en la ampliación de la iglesia.
1690 – La Cofradía devuelve un censal (préstamo) de 10.000 sueldos a D. Gaspart Serret, infanzón, y Doña María De Pedro, conjuges de Fortanete.
1705 – La Cofradía arma soldados vecinos de la villa, los equipa y mantiene a su costa para el ejército borbónico comandado por el príncipe de Tilly en la guerra de sucesión.
1716 – Primer año en el que la parroquia hace un registro detallado de todos los calandinos que cumplen con el precepto de confesar y comulgar en cuaresma. Probable existencia de la procesión de los Comulgares.
1720 – María Bolea deja en su testamento la venta de una casa para ayudar en la construcción de un Santo Sepulcro. Se procesiona el Santo Entierro.
1728 – Recibos por reparar los trajes de los soldados romanos y comprar zapatos para Longinos. Descripción del traje del jefe y de los soldados.
1733 – En la visita pastoral se dicta pena de excomunión a los que se lleven las velas a casa en la celebración de la procesión claustral (misa de Minerva).
Igualmente se manda que todas las rentas en dinero y especie se entreguen pesadas y medidas a los mayordomos, poniéndolas bajo dos llaves, una para el prior y otra para el mayordomo: establecido el derecho de «apuradurías» sobre los residuos de las moladas en los molinos de aceite y su transporte.
1742 – La Hermandad controla la cofradía de San Roque a la que pertenecen los jóvenes del pueblo. Los mozos sacan las hachas en las festividades y domingos de Minerva; y después de los oficios salen por el pueblo a pedir limosna, teniendo que dar cuenta de lo recogido al mayordomo.
1749 – La procesión del Corpus se describe como generalista. La del Santo Entierro no se define como tal y por lo tanto se sobreentiende como individual, por lo que esta a cargo de la Cofradía.
1771 – Organiza fiestas para la Aparición de San Miguel – o Anunciación – y la dominica infraoctava del Corpus. Costea el mantenimiento de la primitiva iglesia de San Miguel y la capilla de la Comunión en la iglesia. La Cofradía sufraga la luminaria de los viáticos y los domingos de Minerva
La Cofradía se financia por el derecho de «apuradurías» y por las rentas que le aportan dos censos (préstamos).
1776 – El arzobispo manda que se renueven los estatutos de la Cofradía.
1786 – En sesión extraordinaria se decide formalizar unos nuevos estatutos según el mandato de 1776.
1787 – Se decide nuevamente ratificar la decisión de renovar las constituciones. Cumpliendo un decreto de un juez de pías causas, se pasa a llevar 3 libros: cuentas, actas y cofrades.
La Cofradía sufraga parte del pleito entre el Ayuntamiento y S.A.R. Sr. Infante D. Antonio Pascual por lo gastado en la obras del pantano de Villanueva y la acequia del rey.
1797 – Se acuerda encargarse la Cofradía del lavatorio de los pies en vista de haberse negado el que lo hacía.
1798 – La Cofradía organiza una novena a San Miguel en forma de rogativa para obtener el beneficio de la lluvia y en el Corpus procesiona San Miguel.
1800 – El estado expropia los bienes raíces de la Cofradía: un olivar en la huerta baja y una casa en los cubiertos de la plaza Mayor.
1802 – Se hacen 52 túnicas. También una peana dorada para llevar la custodia en la procesión del Corpus.
1804 – Se paga un féretro para la iglesia parroquial.
1806 – La Cofradía aporta linternas para los viáticos.
1807 – Se nombran 8 electos y se establece para la votación de aceptación de nuevos hermanos el sistema de garbanzo para SÍ y judía para NO.
1808 – A partir de este año y mientras dura la guerra de la Independencia contra Francia, se donan todos los caudales sobrantes para la lucha contra el francés.
La Cofradía arma soldados y les paga la soldada para luchar contra las tropas francesas durante la guerra de la Independencia.
Los días del Corpus es costumbre hacer un pequeño invite en el que este año y el siguiente están los sacerdotes y padres capuchinos por llevar la peana de la procesión.
Se acuerda que el secretario cobre 250 reales.
1819 – La Cofradía está a punto de desaparecer.
En el convite del día del Corpus se invita a los oficiales que llevan el paso.
1820 – El Arzobispo aprueba que por tres años el cura se encargue de administrarla.
Se cubren las 13 plazas que estaban vacantes.
La Virgen de la Esperanza (expectación de la Virgen) se empieza a celebrar a partir de este año.
1821 – Por primera vez desde su constitución, se renuevan los estatutos. Aprobados por la junta el año anterior, este año son refrendados canónicamente por el Arzobispo.
1822 – Se establece la figura del limosnero, tenia paga en un principio y una de sus funciones era recoger los donativos los días festivos.
1825 – El cura se opone a que las juntas se celebren en la iglesia de San Miguel y se decide hacerlas en la sacristía.
1829 – Se acuerda dar velas los domingos del Señor para la procesión de los fieles (misa Minerva). También al Ayuntamiento en las demás procesiones, más las del altar mayor en los terceros domingos y Corpus.
1833 – Por desavenencias y rivalidades se aprueba que los mozos dejen de participar en las colectas de las festividades y domingos de Minerva. A partir de entonces se encargarán los casados acompañados por el mayoral y el prior. Además, doce de ellos sacarán las hachas acompañados de los mayorales.
1833 – Se restaura el Monumento.
1834 – La Cofradía socorre en la epidemia de cólera al hospital de capuchinos, donde están los enfermos militares, y a los pobres coléricos. Además se apoya al Ayuntamiento y a la Junta de Sanidad. Total 6500 reales.
Se acuerda imprimir las ordenanzas y poner multas a los que no asisten a los entierros ni sacan hacha.
Mandan hacer 34 túnicas. Posteriormente se hicieron también para el Sepulcro.
1839 – A los tambores que tocaron en la procesión del Corpus se le gratifica con dinero.
1841 – Los botos de los molinos son de la Cofradía y con ellos se llevaban el aceite a las casas (se mantiene derecho de apuraduría).
1842 – Paga la Cofradía los pollos de la corrida de San Roque.
1843 – Al señor cura se le entrega una cantidad para el arreglo de la capilla de la Comunión y cortinas para el Sagrario.
1844 – Recibos pagados a los que llevaron los pasos en la procesión a San Roque y San Miguel.
La Cofradía está al cargo del altar de San Roque que estaba en la iglesia.
1848 – Se acuerda cuidar la lámpara de San Roque y dar hachas a los mozos para la procesión de Foz.
1853 – En el capítulo se decide multar a quien no asista a los entierros. También se acuerda poner una tablilla en la puerta de la iglesia dando cuenta de los que mueren.
1856 – Se acuerda que la Cofradía acudirá a fiestas votivas si así lo decide la persona que la hace, si en dicha fiesta se sacan hachas para limosna.
1864 – Los trajes de los putuntunes se cambian para imitar el estilo de los legionarios romanos. Se compran 15 trajes (cascos, corazas, trajes, barbas y bordeguines). También tres machetes y una casaca para el tambor. Se pintan las antiguas alabardas.
Para pagarlo se hizo una suscripción y una llega por el pueblo con asistencia del clero y el Ayuntamiento. Lo que faltó se pagó de fondos de la Cofradía.
1872 – Al morir un electo se cubrirá la vacante el domingo siguiente. El prior (que es cofrade) propondrá un candidato y no a dos como sucedía hasta entonces.
En este año se predica el sermón de las almas en la celebración del aniversario por los difuntos.
1879 – Se acuerda que, cuando muere uno de los 30 electos, los cofrades tengan la obligación de llevar el cadáver y acompañarle con hachas.
1888 – Se vende la armadura del Longindos por 2000 pesetas, con las que se compra un palio, otra armadura, un sepulcro y se hace arreglos.
Al enterarse el pueblo se opone, teniendo que salir el comprador de noche y escoltado, acudiendo fuerzas de la Guardia Civil de Alcorisa, Alcañiz y otros pueblos para evitar desórdenes. Fue tal la controversia que durante muchos años estuvieron sin aprobarse las cuentas de la Cofradía por negarse el sr. cura.
1890 – Se venden unas alfombras del Monumento.
1891 – En la visita pastoral del arzobispo se aprueban las cuentas que estaban pendientes desde 1888 por el enfado de la venta de la armadura.
1901 – La Cofradía está presente en el entierro del Cardenal Cascajares portando los electos hachas encendidas y el pendón del Santo Entierro.
1906 – Se compran dos faroles para las procesiones del Milagro y del Santo Rosario en las que procesionaba también el estandarte de la Cofradía.
La celebración del novenario de mayo que se hacían en la iglesia de San Miguel se cambia a después de la San Miguel en septiembre.
1907 – Debido a los excesos que cometen los mozos se decide que no saquen en la Semana Santa las cruces grandes propiedad de la Cofradía. También se acuerda hacerse cargo la Cofradía de la organización de las procesiones, y, por tanto, los señores electos llevarán los cetrillos.
1908 – La Cofradía contribuye al arreglo de la capilla de la Comunión. Se comprometen además los señores electos al sostenimiento de la lámpara del Santísimo Sacramento cuando no haya fondos.
1913 – Se acuerda contribuir para la bandera de la Adoración.
1919 – Cambian los importes que se cobran en los entierros por «la merma de cera» según el modelo se pida.
1925 – Participa la Cofradía en la procesión rogativa para que llueva, llevando hacha y la imagen de la Virgen del Pilar.
1926 – Se renuevan los estatutos de la Cofradía, siendo aprobadas por el arzobispo.
1936 – En la contienda civil se destruye la Iglesia de San Miguel a cargo de la Cofradía así como toda la documentación (libros de actas, bulas, decretos), el Santo Sepulcro, palio, pena del Corpus y de San Miguel, Longinos y resto de equipación de los putuntunes, pendón del Santo Entierro, cruces de Semana Santa, faroles y cualquier otro bien de la hermandad.